El portavoz de las operaciones del Ejército de la RDC en la provincia de Kivu Norte, teniente coronel Guillaume Ndjike Kaiko, refirió en un comunicado que “los terroristas de las Fuerzas de Defensa de Ruanda (FDR) lanzaron ataques simultáneos alrededor de las 4:52 a.m. del miércoles 10 de julio de 2024”.

Añadió que dichas acciones estuvieron dirigidas hacia las posiciones de las Fuerzas Armadas y sus socios ubicadas en las aldeas de Nyange y Mpati, y su resultado fue un desplazamiento masivo de poblaciones que agravó aún más la situación humanitaria y dificultó el acceso del personal humanitario.

Ndjike Kaiko subrayó que se trata de un incumplimiento por parte de Kigali de la tregua humanitaria pactada y refleja la “legendaria actitud belicosa” de Ruanda, que quiere “mantener a las poblaciones desplazadas en condiciones atroces, privándolas así del acceso a ayuda humanitaria”.

De acuerdo con Radio Okapi, el miércoles los rebeldes del Movimiento 23 de Marzo (M23), que recibe apoyo ruandés, se enfrentaron a grupos armados en el oeste del grupo Bashali Mokoto, en territorio de Masisi.

Tras unas horas de confrontaciones el M23 tomó el control total de la aldea de Nyange, de donde desalojaron al grupo armado Alianza de Nacionalistas Congoleños para la Defensa de los Derechos Humanos (ANCDH).

Recientemente un informe de expertos de Naciones Unidas confirmó la participación directa de las FDR en el conflicto en la RDC, y afirmó que entre tres mil y cuatro mil integrantes de ese cuerpo armado están desplegados en territorio congoleño junto al M23.

La cifra está calificada de conservadora y constituye solo una parte del apoyo, pues también brindan respaldo con tecnologías y equipos militares de vanguardia, precisó el reporte.

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