Por Jorge Petinaud Martínez
Corresponsal jefe en Bolivia
“Se trata de un destacado crítico de cine que ha contribuido mucho en este campo, escribió un libro muy importante acerca de la historia del séptimo arte”, aseguró en entrevista concedida a Prensa Latina Mela Márquez, directora de la Cinemateca.
La también cineasta dijo a esta agencia de noticias que los escritos de Gumucio son muy leídos en su blog y en diversas publicaciones nacionales y de países de varios continentes.
Márquez recordó que muy joven se introdujo en el cine influido por el sacerdote jesuita y cineasta Luis Espinal, cuyos seminarios lo marcaron.
Así nació una colaboración con Espinal como redactor del semanario Aquí, que solo se interrumpió con el asesinato de ese sacerdote por la dictadura militar el 21 de marzo de 1980.
Ese vínculo quedó plasmado en su libro Luis Espinal y el Cine (1986).
Los estudios de cine, fotografía, sociología y comunicación que realizó en universidades de Francia le permitieron a Gumucio colaborar con cineastas de la talla de Alain Labrousse y Jorge Sanjinés.
Posteriormente, sobre la base de su creatividad se desempeñó como guionista junto a Antonio Eguino y como director y productor de documentales, de los que realizó decenas.
Entre estas obras resalta Señores Coroneles, Señores Generales (1976) que profundiza en el papel de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos y el Ejército de Bolivia en el golpe militar de 1971 contra el Gobierno de Juan José Torres.
Incluye en este filme el artista, entrevistas a personalidades de mucha relevancia como el exoficial de la CIA Phillip Agee y el periodista francés Regis Debray.
En resumen, con su pluma y su cámara Gumucio ha dejado una importante huella en la comunicación, la política y la cultura de Bolivia.
Este quehacer incluye cerca de 15 documentales filmados en Bolivia, América Latina y África.
Como crítico de cine, durante décadas ha mantenido columnas en publicaciones de América Latina, del Norte y de África.
También su talento dio origen a una veintena de libros entre los que sobresale La Máscara del Gorila (1982), Premio del Instituto de Bellas Artes de México.
Esto es parte del aval de la personalidad seleccionada para recibir el Premio Patrimonio de la Fundación Cinemateca de Bolivia en 2024.
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