En un editorial publicado en su sitio web y titulado Trump: un atentado perturbador, el periódico refiere que el hecho ocurrido la víspera es mucho más que una repudiable expresión de violencia que pudo acabar con la vida del controvertido magnate, quien sufrió sólo una herida menor en la oreja.
“El acto en el que fue perpetrado el ataque (en Butler, Pensilvania) fue uno de los últimos de precampaña de Trump, previos a la convención republicana que habrá de realizarse mañana en Milwaukee, Wisconsin, y en la que se da por segura su postulación a la presidencia”, apunta.
“Otro elemento de contexto insoslayable –añade-, es la extremada polarización en la que ha desembocado el proceso electoral y la del propio Trump ha sido catalizador y beneficiario”.
“Con ese telón de fondo, desde los primeros minutos posteriores al atentado los partidarios del republicano señalaron a ‘la izquierda’ y al ‘comunismo’ como puntos de origen de la agresión, en lo que constituye un reflejo del discurso trumpiano”, expone el prestigioso medio de prensa.
Agrega que tal discurso “en forma machacona y sin fundamento acusa al presidente Joe Biden y al campo demócrata en general de ser ‘marxistas’ y ‘ultraizquierdistas’”.
“Con estos antecedentes, es de temer que el ataque de ayer exacerbe los ánimos de muchos seguidores del expresidente, de por sí exaltados y fanáticos”, afirma.
A juicio del rotativo, “este efecto podría, por desgracia, debilitar aún más el de por sí precario dique de contención que les ha impedido recurrir a una violencia como la que ya se manifestó en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, cuando una turba de trumpistas armados intentó evitar que Biden asumiera el cargo presidencial”.
El diario asevera que más allá de la coyuntura política y electoral, “no debe dejarse de lado la epidemia de violencia armada que afecta a Estados Unidos desde hace décadas y que tiene uno de sus motores principales en la industria armamentista y en la descontrolada e ilimitada venta de artefactos de muerte”.
“Pese a los esfuerzos de sectores políticos y sociales por introducir una mínima sensatez en ese libertinaje armamentista, en el país vecino se expande el culto a las armas de fuego y, lo más grave, se afianza la creencia de que éstas tienen una utilidad real para resolver conflictos sociales o personales”, alerta.
La Jornada subraya que “el universo de los partidarios de ese armamentismo ciudadano se intersecta con el de los seguidores más exaltados de Donald Trump, quienes son también los más convencidos creyentes de la teoría conspiratoria que atribuye la derrota de su líder en los comicios de 2020 a un supuesto fraude electoral en su contra”.
“A lo que puede verse, pues, el condenable atentado de Butler puede acelerar el curso de la sociedad estadounidense hacia un abismo de violencia descontrolada y generalizada. Ojalá que no sea el caso”, concluye.
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