Los líderes insumisos, socialistas, ecologistas y comunistas enviaron un documento al bloque oficialista Juntos por la República (el partido gobernante Renacimiento y sus aliados) y a los conservadores (Los Republicanos), en el que convocaron a un encuentro para materializar su demanda de frenar en la cámara baja las aspiraciones de RN.
A dos días de la primera sesión pública de la Asamblea, en la que se definirán sus principales puestos, la izquierda pretende impedir en particular que la fuerza política liderada por Marine le Pen acceda a una de las vicepresidencias en el Palacio Bordón.
Estimamos que RN no tiene espacio en cargos en una de las más altas instancias de nuestra República, refleja el mensaje, al que tuvo acceso aquí la prensa.
La batalla por los puestos en la Asamblea Nacional promete ser dura, dada la ausencia de un bloque con la mayoría absoluta, al menos 289 de sus 577 diputados.
Para el Nuevo Frente Popular, la invitación es a evitar la banalización y la legitimación de la extrema derecha.
La líder de RN, Le Pen, rechazó la convocatoria, con el argumento de que la unidad que buscan es contra la democracia y el pluralismo.
Esgrimió que casi un 40 por ciento de los franceses votó por su partido en las recientes legislativas.
El Nuevo Frente Popular encabezó una maniobra, apoyada por el oficialismo, para impedir en el balotaje de las parlamentarias, el 7 de julio, que RN alcanzara la mayoría absoluta en la Asamblea.
Más de 220 aspirantes a diputados retiraron su candidatura para que otro pudiera sumar votos y derrotar al representante de RN.
Entonces el argumento fue el mismo, frenar el avance de la extrema derecha en Francia, a la que acusan de sembrar odio.
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