Según la agencia gubernamental, las precipitaciones acumuladas en las últimas doce horas oscilaron entre los 115 y 168 milímetros en las comarcas de Jindo, Bogil, Wando, Haenam y Goheung.
Los fuertes aguaceros ocasionaron inundaciones, deslizamientos de tierra y caídas de árboles en la región, por los que se realizaron un total de 97 acciones de seguridad por parte del Cuerpo de Bomberos.
Hasta el momento se registran decenas de autos por debajo del nivel del agua en Wando, y un deslizamiento de tierra que provocó la evacuación de una familia en Haenam; todavía no se reporta ninguna víctima fatal.
Se espera que las precipitaciones continúen y se extiendan hacia la parte septentrional de la provincia, con lluvias estimadas de 30 a 80 milímetros en la ciudad de Gwangju y más de 100 milimetros en la costa meridional de Jeolla del Sur.
El presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, designo este lunes cinco áreas en las regiones centrales y meridionales del país como zonas especiales de desastre a causa de las lluvias torrenciales.
Las cinco zonas: Yeongdong, en la provincia de Chungcheong del Norte; Nonsan y Seocheon (Chungcheong del Sur); Wanju (Jeolla del Norte); y una parte de Yeongyang (Gyeongsang del Norte), fueron designadas tras una investigación de daños.
La designación de una zona especial de desastre habilita que el área sea apta para recibir apoyo financiero gubernamental en obras de recuperación, fondos de asistencia para las víctimas y otros beneficios.
Lluvias torrenciales récord empaparon Corea del Sur la semana pasada, dejando un saldo de seis muertos y dos desaparecidos, según el Gobierno.
Miles de personas se vieron obligadas a evacuar, especialmente en las regiones meridionales.
Para finales de este mes, el Gobierno planea considerar añadir más zonas especiales de desastre, después de terminar una evaluación conjunta de daños de otras áreas afectadas.
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