En su más reciente editorial, dedicado a las políticas del Ejecutivo que desde el 1 de julio encabeza José Raúl Mulino, la organización obrera señala que volverán medidas paramétricas para salvar de la crisis a la Caja de Seguro Social (CSS), la única entidad pública que atiende a jubilados y pensionados.
La Conusi indicó que junto al Consejo Nacional de Trabajadores Organizados (Conato), otra de las centrales obreras, volverán a rechazar en unidad acciones como subir la edad de jubilación y elevar las cuotas que pagan los trabajadores.
En ese sentido, se enfatiza en la necesidad de hacer un esfuerzo unitario para enfrentar una administración que adelantó ser 100 por ciento proempresa privada y que no tiene contemplado en su agenda, ni en su programa, el mejoramiento de la situación que a diario enfrentan los trabajadores.
Las organizaciones estiman importante lograr revertir los dos sub sistemas que se crearon en 2005, para dividir a los asegurados y hacer sucumbir el subsistema definido o solidario.
Asimismo, instaron a una discusión integral de los programas que tiene la CSS, porque se requiere un cambio al modelo económico neoliberal que los deteriora.
La Conusi subrayó la importancia de preservar la autonomía de la CSS, sancionar severamente la evasión, cobrar la morosidad, tanto del Gobierno como de la empresa privada, entre otras medidas y recomendaciones presentadas hace casi dos décadas.
Por otra parte, la central obrera convocó a estar atentos a las pretensiones del nuevo Gobierno de negociar con Minera Panamá, filial de la trasnacional canadiense First Quantum, con la política de “abrir para cerrar”, en relación con la mina de cobre en Donoso (Colón) la mayor de Centroamérica, pese a que el pueblo en las calles a finales de 2023, rechazó la minería metálica a cielo abierto.
El Ejecutivo indicó que antes hará una auditoría previa, donde ya tienen a la empresa que será contratada directamente, pero sin previa consulta a la población, lo cual es violatorio de acuerdos internacionales sobre temas ambientales, como el de Escazú, firmado en 2018, indicó la Conusi.
Para el colectivo obrero, según el documento, todas estas acciones tienen lugar en medio del incremento del desempleo, despidos masivos, auge vertiginoso del costo de la vida y múltiples evidencias sobre el saqueo de las arcas de los Municipios y Juntas Comunales, lo que quedará en impunidad.
Además señalaron la controversial política del nuevo ministro de Economía y Finanzas, Felipe Chapman, de cumplir los compromisos de pago con los proveedores, mientras en su campaña hablaron de más chen-chen (dinero) para el pueblo, que se pone en duda, cuando la evidente prioridad son los empresarios.
También calificó de incoherente la política exterior de Panamá al anunciar su interés de integrarse al Mercado Común del Sur y de otra parte, el mismo día de la toma de posesión del Gobierno el 1 de julio, firma un memorándum de entendimiento con Estados Unidos, para frenar los flujos por la selva de Darién, sumándose así a la perversa e inhumana política del norteño país en materia de migración irregular.
Tampoco descartan una ofensiva contra la clase trabajadora como sucede con el cierre arbitrario de cuentas bancarias del Sindicato de la Construcción y los anuncios de posibles reformas al Código de Trabajo, en desconocimiento de anteriores acuerdos sobre los empleados públicos.
Al respecto la Conusi llamó a estar alerta ante estos peligros en ciernes y prepararse para la lucha unitaria en defensa de los sagrados intereses de la clase trabajadora y del pueblo panameño.
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