Unos mil 200 trabajadores, miembros del Sindicato Nacional de Trabajadores de Samsung Electronics (NSEU) participaron en la manifestación, realizada en un edificio de Samsung en Yongin, al sur de Seúl.
El jefe del NSEU, Son Woo-mok, dijo a los trabajadores que la huelga no cambiará todo de una vez, pero producirá transformaciones paso a paso.
Vestidos con camisetas negras y cintas para el cabello con la leyenda «huelga general» impresa en ellas, los trabajadores sindicalizados prometieron una «victoria» en su huelga.
El sindicato y Samsung Electronics mantendrán conversaciones este martes, lo que será la primera reunión cara a cara desde que se declaró el paro, el pasado 8 de julio; el diálogo se entablará a fin de resolver la acción colectiva que busca un aumento salarial.
Las demandas del NSEU incluyen un aumento del 5,6 por ciento en el salario básico para todos los miembros, un día libre garantizado el día de la fundación del sindicato y la compensación por las pérdidas económicas ocasionadas por la huelga.
Samsung Electronics ha dicho que, a pesar del paro, ha habido un impacto mínimo en la producción.
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