Un reciente informe del organismo advierte sobre cómo el incremento de los trabajadores expuestos al estrés térmico que puede causar rápidamente enfermedad, insolación o graves problemas cardíacos, pulmonares, renales e incluso la muerte.
El texto El calor en el trabajo: Implicaciones para la seguridad y la salud revela que existen regiones que no estaban acostumbradas al calor extremo y ahora enfrentan mayores riesgos, mientras que en climas ya calurosos las personas se encuentran en condiciones cada vez más peligrosas.
Unos cuatro mil 200 empleados, subraya el texto, perdieron la vida por olas de calor en 2020, y en total, 231 millones estuvieron expuestos a las altas temperaturas en 2020, lo que supone un aumento del 66 por ciento respecto a 2000.
No obstante, el informe destaca que nueve de cada 10 estuvieron sometidos a un calor excesivo fuera de una ola de calor y que ocho de cada 10 lesiones profesionales -por esa causa- también se produjeron fuera de las mencionadas olas de calor.
Al respecto, el Director General de la OIT Gilbert F. Houngbo, señaló que mientras el orbe lidia con el alza de las temperaturas, hay que proteger a los trabajadores del estrés térmico durante el año.
Es una situación que “está creando desafíos sin precedentes para los trabajadores de todo el mundo durante todo el año, no sólo durante los períodos de olas de calor intensas», alertó.
África, los estados árabes, y Asia y Pacífico son los más expuestos a las altas temperaturas. En estas regiones, el 92,9 por ciento, el 83,6 y el 74,7 de la mano de obra está afectada, respectivamente. Cifras superiores a la media mundial del 71 por ciento, según las los datos disponibles de 2020.
Las conclusiones del informe se basan en una investigación publicada en abril de este año que indica que el cambio climático genera graves peligros para la salud de unos dos mil 400 millones de trabajadores expuestos a un calor excesivo causante por sí solo de 22,85 millones de lesiones profesionales y la pérdida de 18 mil 970 vidas anuales.
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