Es probable que esta precipitación mantenga bajo el comportamiento del fuego durante las próximas 72 horas, comentó en su sitio web oficial la agencia Parks Canada, gestora de esos espacios en la nación.
Según la entidad, tanto las lluvias reportadas, como el descenso de las temperaturas facilitarán la labor de los bomberos.
Los funcionarios del Parque Nacional Jasper, el más grande de la nación, afirmaron la víspera que el área afectada por los siniestros, los cuales redujeron a cenizas gran parte del popular poblado turístico del mismo nombre sin que de momento se reporten daños humanos, se estima ahora en 36 mil hectáreas.
Un tercer incendio, desatado este viernes, arde cerca de Miette Hot Springs, que se encuentra próximo a la frontera este del parque nacional y a unos 35 kilómetros al noreste de la ciudad de Jasper.
De acuerdo con la información divulgada, bomberos de otras naciones, como México y Sudáfrica, apoyarán en la extinción de los siniestros.
El oeste de Canadá sufre el estallido de incendios provocados por la caída de rayos y que se avivaron con la sequía y el calor intenso.
Reportes oficiales señalan que solo en la provincia de Alberta arden más de 170 y preocupa que muchos se registran en la región de Fort McMurray, donde se extrae petróleo de las arenas bituminosas.
El año pasado el país norteamericano sufrió un récord de siniestros que conllevó a refugiar a más de 235 mil ciudadanos, dejó un bombero muerto y más de 18 millones de hectáreas de bosques consumidas.
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