Esas incursiones, unido al cierre de los cruces fronterizos, impiden la entrega de suministros vitales que salvan vidas, criticó el grupo en un comunicado.
También denunció las constantes órdenes del Ejército israelí a la población para evacuar de una zona a otra en Gaza.
Recientemente, en apenas cuatro días más de 190 mil palestinos fueron obligados a abandonar las ciudades de Deir Al Balah y Khan Yunis, tras el inicio de ofensivas terrestres contra ambas localidades, subrayó.
Sobre el tema, citó datos de la ONU, según los cuales, más del 80 por ciento del enclave costero fue puesto bajo órdenes de evacuación o designado como zona prohibida por los militares.
Save the Children condenó los ataques contra socorristas, trabajadores humanitarios y sedes de organizaciones no gubernamentales.
Muchas ong tienen suministros en el lado egipcio de la frontera a la espera de recibir instrucciones para trasladarlos a Gaza, pero la zona de descarga en el cruce fronterizo de Kerem Shalom/Karam Abu Salem está llena debido a la alta inseguridad, las operaciones militares israelíes y el riesgo de saqueo, lamentó.
Como ejemplo citó los casos de Oxfam, que espera poder ingresar tanques de agua, unidades de desalinización, generadores y letrinas, mientras el Consejo Noruego de Refugiados tiene 864 carpas necesarias para la población desplazada.
Al respecto, señaló que lograron cruzar cuatro camiones con medicinas tras esperar más de un mes bajo el calor en ese paso fronterizo.
La ONU estima que el volumen diario promedio de la ayuda humanitaria disminuyó 56 por ciento desde abril, alertó.
“Estamos haciendo todo lo posible para salvar la vida de los niños en Gaza, pero nuestro trabajo se vuelve cada vez más difícil cada día”, afirmó Jeremy Stoner, director de Save the Children para Medio Oriente.
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