Según informó hoy la OPS, la subvención de cinco millones de dólares acordada en Río de Janeiro, Brasil, el 30 de julio, busca reducir las muertes relacionadas al virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en la región abordando la prevención y el tratamiento de la enfermedad avanzada.
Detalló que la colaboración se centrará en identificar brechas y barreras en los programas nacionales de VIH, fortalecer la vigilancia del virus, acelerar la introducción de nuevas pruebas y tratamientos, y capacitar al personal de salud.
Para lograr tales objetivos, el director de la OPS, doctor Jarbas Barbosa, señaló que se requiere descentralizar la atención del VIH para que esté más cerca de las personas que la necesitan.
Esta subvención —dijo— nos permitirá apoyar a los países a incorporar herramientas para avanzar aún más rápido hacia la eliminación de las muertes relacionadas al VIH/sida.
Se estima que 2,3 millones de personas viven con VIH en América Latina y 340 mil en el Caribe.
Los datos muestran que en los últimos 10 años el número de muertes relacionadas al VIH disminuyó 28 por ciento en América Latina y 57 por ciento en el Caribe, debido esencialmente a las modernas opciones de tratamiento.
Sin embargo, en 2023, las nuevas infecciones aumentaron nueve puntos porcentuales en Latinoamérica, a pesar de las reducciones del 22 por ciento en el Caribe y del 51 por ciento a nivel mundial, lo que destaca la necesidad urgente de intervenciones más específicas.
Desde 2006, Unitaid —asociación auspiciada por la Organización Mundial de la Salud — ha desbloqueado más de 100 productos de salud relacionados con el VIH, la tuberculosis, la malaria, la salud de mujeres y niños y la preparación ante pandemias, los que benefician cada año a más de 170 millones de personas.
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