Desde las colinas que rodean el valle, otrora una de las zonas de mayor producción de azúcar mascabada (cruda) en los siglos XVII y XVIII, se divisa esta oferta de la Empresa de Flora y Fauna de Sancti Spíritus.
La Heroína del Trabajo María Elvira Dávila, su directora, dijo a Prensa Latina que se avanza potenciando la actividad turística y de recreación en Trinidad con diversas actividades tradicionales y en el litoral del mar Caribe.
Explicó que en la casa-hacienda El Abanico se brinda un encuentro real con el medioambiente, recorridos a caballo, la observación de la vegetación y los ríos, con el complemento gastronómico de una mesa con los mejores platos de la cocina del campo cubano.
Además se puede disfrutar de cocteles de frutas naturales propias de la zona, el guarapo de caña de azúcar, cumpliendo con tradiciones de la localidad en su presentación y preparación.
Comentó que la casa fue galardonada con el Premio Provincial de Restauración del Patrimonio Inmueble, y fue construida por ingeniero alemán Guillermo Fischer y Lynn a principios del siglo XX en los terrenos dedicados a la ganadería y la producción azucarera.
El Centro de Snorkeling y Buceo La Batea es la más reciente de las ofertas dedicadas a promover el turismo ecológico y responsable en las actividades subacuáticas que se desarrollan en la barrera coralina de la costa sur espirituana.
Yailén Rodríguez, comunicadora, indicó es una novedosa fuente de entretenimiento y formación ambiental para nacionales y foráneos, su preparación y acondicionamiento estuvo en el orden de los 20 millones de pesos en dos años.
En la actualidad suman más de 20 las ofertas de turismo de naturaleza puestos a disposición de los visitantes por Flora y Fauna Sancti Spíritus, con presencia activa en cinco áreas protegidas.
Por más de 30 años consecutivos la Empresa Flora y Fauna ha obtenido la condición de Vanguardia Nacional, con sostenidos logros en la protección de la biodiversidad, el turismo de naturaleza y la producción de alimentos. rgh/rga