De acuerdo con el más reciente informe, en el primer semestre de este año se reportaron 139 mil 51 nuevos contratos, lo que representa una disminución del 0,6 por ciento en relación con el mismo período del año pasado y 31 por ciento por debajo de los de 2019.
La Contraloría anunció que este mes de agosto realizaría una encuesta de hogares para conocer las nuevas estadísticas, ante índices que señalan un desempleo superior al 7.0 por ciento y una tasa de informalidad superior al 50 por ciento.
Sobre el tema, el consultor laboral René Quevedo dijo a la prensa que las cifras del primer semestre indican que la economía está generando 10 mil 510 vacantes menos por mes en comparación con 2019, siendo los jóvenes los principales afectados.
“Hay una contracción del circulante y menos consumo, por lo que la capacidad de la economía para generar empleos formales estará determinada por la velocidad con la cual se pueda inyectar más liquidez”, comentó.
Por su parte, Temístocles Rosas , presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada, opinó que la reducción de la inversión privada, la etapa electoral y la crisis fiscal que enfrenta el gobierno han creado un entorno desfavorable para la creación de nuevos empleos, señaló.
También el economista Carlos Arauz sostiene que la generación de empleo formal está íntimamente relacionada con la confianza del capital privado en la estabilidad de la inversión y agrega que esa confianza pasa necesariamente por la fortaleza de las instituciones y las competencias básicas de las personas.
En abril pasado, Panamá firmó un Memorando de Entendimiento para el Programa de Trabajo Decente para el período 2024-2027, impulsado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El convenio deberá promover políticas públicas coherentes, integrales, inclusivas y equitativas para la generación de empleo, ofreciendo garantías sociales y económicas en equidad y atención a poblaciones en condición de vulnerabilidad, con énfasis en los jóvenes y con enfoque de género.
El documento, firmado por el Ministerio de Trabajo, sindicatos y gremios empresariales, también pretende extender de manera integral y sostenible la cobertura y suficiencia de la protección social y laboral de los empleados y sus dependientes.
Recientemente el actual gobierno de José Raúl Mulino lanzó el programa Mi primer Empleo para favorecer a unos mil jóvenes, pero economistas señalan que no es suficiente y para que sea estable requiere muchos fondos del Estado.
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