La noticia cayó con una jarra de agua fría encima de aquellos que tenían su papeleo adelantado, y contando los días para darse una nueva oportunidad en su vida dejando atrás los días tristes que ocasiona la violencia.
Esta angustia mezclada con incertidumbre comenzó cuando la administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, decidió pausar las autorizaciones de viaje para el programa de libertad condicional humanitaria que permite a miles de migrantes de cuatro países, incluido Haití, viajar directamente a la nación norteña.
La pausa, provocada por las revelaciones de fraude en las solicitudes de patrocinio, permite al Departamento de Seguridad Nacional revisar los procesos y fortalecer las medidas para prevenir las violaciones.
Según una filtración compartida por la Federación para la Reforma Migratoria Estadounidense, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza dejó de emitir autorizaciones de viaje para venezolanos el 6 de julio y para otras nacionalidades, incluidos los haitianos, el 18 de julio.
«El informe interno revela anomalías preocupantes, como el uso repetido de números de Seguro Social, direcciones y números de teléfono, algunos incluso pertenecientes a personas fallecidas o unidades de almacenamiento», subraya el diario Le National.
La tramitación de las solicitudes -según las autoridades estadounidenses- se reanudará tan pronto como se establezcan los mecanismos de protección antifraudes.
mem/joe
