Por Amílcar Morales
La manifestación partió de la Plaza Baquedano y recorrió varios kilómetros en la emblemática Avenida de La Alameda hasta el denominado Bandejón de Los Héroes, donde tuvo lugar un acto central.
Durante un breve alto frente al Palacio de La Moneda, el presidente del Colegio de Profesores y Profesoras, Mario Aguilar, envió en nombre de los participantes un mensaje al gobernante Gabriel Boric.
“Hoy día nos estamos movilizando contra la violencia, el acoso y el agobio”, dijo el dirigente magisterial, y agregó que una de las mayores muestras de maltrato hacia el sector es la llamada deuda histórica, la cual incide en la calidad de vida de miles de profesores.
Recordó Aguilar que el gobierno prometió resolver esta injusticia y pasaron dos años y medio y no ha cumplido. “Estamos esperando, todavía tenemos confianza, aseguró, pero de usted depende saber si la palabra del presidente tiene algún valor”.
En declaraciones a Prensa Latina, la vocera de la Asociación de Profesores Jubilados, Patricia Garzo, explicó que la deuda se originó cuando, durante la dictadura militar (1973-1990), el Estado pasó la administración escolar de manos del gobierno central a las municipalidades.
Poco antes de eso, dijo, se aplicó un aumento del 90 por ciento al salario base, pero los nuevos empleadores se negaron a reconocer ese incremento y mantuvieron los sueldos anteriores, lo cual también afectó el monto de las pensiones.
“La deuda lleva ya 43 años y nosotros desde 2006 venimos a protestar frente a La Moneda sin tener respuesta”, señaló Garzo, quien calculó el monto perdido en unos 94 millones de pesos por cada docente (alrededor de 100 mil dólares al cambio actual).
Por su parte Eric Campos, secretario general de la Central Unitaria de los Trabajadores, señaló a esta agencia la importancia de solidarizarse con los profesores, dado el agobio, maltrato, la violencia y bajos salarios que sufren.
Llamamos al gobierno a hacerse cargo de mejorar las condiciones laborales y eliminar el acoso, no podemos tener profesores que son golpeados y violentados en los centros escolares, puntualizó.
Durante el acto central en el Bandejón de Los Héroes, los miles de asistentes hicieron un minuto de silencio en memoria de sus colegas Katherin Yoma, de Antofagasta, y Albano Muñoz, de El Maule, quienes optaron por quitarse la vida debido al maltrato y las agresiones.
Las marchas fueron replicadas en numerosas ciudades de todas las regiones de Chile y solo en esta capital se congregaron unos 40 mil educadores, dijo Mario Aguilar.
rgh/car/eam
