En su vertiginoso ascenso al podio, la también sargento de la Policía Nacional ya hizo historia al merecer la medalla de bronce frente la camerunense Cindy Ngamba, del equipo de refugiados, pero afirmó que esta tarde irá por más.
En visita de Prensa Latina al gimnasio Pedro “Rockero” Alcázar, de la localidad capitalina de Curundú, donde la Bylon comenzó sus andanzas por el ring, su compañero de entrenamiento y del ciclo olímpico y mundial, Jonathan Milien, comentó que su colectivo seguirá cada movimiento de su campeona con la seguridad que traerá el oro para Panamá.
El exboxeador profesional señaló que en su etapa de amateur, durante la preparación para los mundiales de Ekaterimburgo, Rusia ( 2019) y de Serbia( 2021), además de varias ediciones de Juegos Bolivarianos y los Centroamericanos y del Caribe, pudo apreciar una atleta de coraje, disciplina y fe en la victoria.
Por su parte, el entrenador de pugilistas profesionales y amateur istmeños José Murillo destacó que conoció desde sus inicios la carrera de Bylon y se siente orgulloso de las condiciones que tiene y que con sus pasos en París 2024 podrá demostrar que Panamá es un semillero de campeones.
Otros miembros del colectivo del gimnasio donde comenzó el camino a medallas de Bylon, comentaron que la pelea que seguirán desde su casa de entrenamiento va más allá del boxeo; es un símbolo de esperanza, fuerza y unidad para un país que, desde la distancia, enviará energía y apoyo incondicional a la hija de esta tierra.
Desde su inclusión en los Juegos Olímpicos, el boxeo femenino ha emergido como una de las disciplinas más emocionantes y competitivas del evento bajo los cinco aros.
Este deporte, que combina fuerza, estrategia y valentía, ha capturado la atención de millones de fanáticos en todo el mundo, mostrando que las mujeres pueden competir al más alto nivel y alcanzar la gloria olímpica.
El debut del boxeo femenino en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 marcó un hito en la historia de esa disciplina, según analistas.
Con el bronce ya obtenido por Bylon se trata de la primera medalla olímpica obtenida por una mujer panameña y de la disciplina del boxeo.
A la fecha, Panamá contaba solo con tres medallas olímpicas: dos bronces en Londres 1948, en los 100 y 200 metros masculinos, ambas de Lloyd La Beach; y el oro en Pekín 2008 de Irving Saladino, en salto de longitud.
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