«En memoria de las 61 víctimas del trágico accidente de Vinhedo, declaramos luto oficial por tres días en el país», escribió Lula en la red social X, junto al decreto oficial.
Según la compañía Voepass Linhas Aéreas, el aparato volaba del aeropuerto de Cascavel, situado en el estado de Paraná, al de Guarulhos, en Sao Paulo, cuando cayó a las 13:25 (hora local) del viernes en la localidad de Vinhedo, cerca de una zona de viviendas.
La aerolínea explicó que, a bordo de la aeronave de hélices modelo ATR-72, viajaban 57 pasajeros y cuatro tripulantes, y no 62 personas como se informó inicialmente.
Audiovisuales en redes sociales muestran al aparato girando sobre su eje mientras cae a tierra sobre un área poblada.
Este accidente aéreo resulta el de más víctimas mortales en el país desde que en 2007 un avión de TAM se apartara de la pista en el aeródromo paulista de Congonhas y ocasionara la muerte de 199 personas.
Voepass informó que acompaña a las autoridades en la investigación del siniestro y que la aeronave tenía «todos sus sistemas aptos para la realización de la operación» de vuelo.
El Gobierno de Sao Paulo creó un gabinete de crisis después que el avión se estrellara.
«Se instalará una oficina de crisis del Gobierno en Sao Paulo para brindar el apoyo necesario tanto al operativo como a las familias de las víctimas», informó en X el gobernador Tarcísio Gomes de Freitas.
Además de las fuerzas de seguridad del Estado y de la Defensa Civil, formarán parte de este gabinete el Ministerio de Puertos y Aeropuertos, la Agencia Nacional de Aviación Civil y el Gobierno de Paraná.
Gomes de Freitas comunicó que se instaló un puesto de mando a unos 100 metros del fatal suceso «para monitorear el trabajo de los equipos involucrados en la ocurrencia de este triste accidente».
La Policía Federal confirmó asimismo que un equipo de agentes se desplegó en la terminal aérea de Guarulhos para apoyar las pesquisas sobre la tragedia.
ro/ocs
