Reiteramos nuestra exigencia a Estados Unidos para que se retire inmediata e incondicionalmente de nuestros territorio y respete la voluntad de los sirios que rechazan tal ocupación y las acciones criminales de las FDS, afirmó la Cancillería por medio de un comunicado publicado en su página oficial en la red social Facebook.
La nota condenó los recientes ataques de los aviones de combate estadounidenses contra civiles inocentes que solo defendían a sus familias, pueblos y propiedades de las agresiones de los irregulares de FDS.
Damasco asegura que la ocupación estadounidense de parte del territorio sirio representa una flagrante violación de la soberanía, unidad e integridad territorial del país, y rechaza el apoyo de Washington a esta formación ilegal manipulada para implementar los planes estadounidenses anti-sirios, aclaró el texto.
Destacó que todas las prácticas inhumanas e inmorales de las FDS contra la población en las regiones oriental y nororiental, incluido la prohibición del acceso a los suministros de alimentos y agua potable, tienen como objetivo agravar el sufrimiento de los sirios y prolongar la guerra contra ellos.
El comunicado reafirmó la voluntad del pueblo sirio de liberar su tierra y preservar su soberanía sin importar cuanto sean los sacrificios.
Nuestro empeño por la liberación no será disuadido por el terrorismo y los crímenes de estas formaciones ilegales, concluyó el Ministerio su declaración. Una mujer y su hija murieron el viernes último, y otras siete personas resultaron heridas, incluyendo niños, tras bombardeo de las FDS contra la localidad de Al-Buel, en el norte de la provincia de Deir Ezzor, a unos 450 kilómetros al nordeste de esta capital.
El ataque de represalia ocurre después de una gran ofensiva de las fuerzas tribales árabes en la que expulsaron a los irregulares de FDS de varias localidades en el nordeste de Deir Ezzor.
Las Fuerzas Democráticas de Siria dominan la mayor parte de la región de Al-Jazira, rica en petróleo, y recibe armas, dinero y adiestramiento de las unidades de ocupación de Estados Unidos presentes ilegalmente en más de una quincena de bases militares en esta nación levantina.
Las acciones populares se incrementan contra esa entidad ilegal debido a la indignación surgida de sus criminales prácticas contra los pobladores y su servilismo a Estados Unidos, además del robo del crudo y los cultivos de los sirios.
mem/fm