La negativa del CST a reunirse con la milicia Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, en inglés), comandada por el general Mohamed Hamdan Dagalo, ocurre mientras ambos combaten por controlar la ciudad de Fasher, capital de Darfur del Norte, donde se reportan 48 muertos en casi 30 heridos en apenas horas.
La negativa sigue a la entrevista la víspera con diplomáticos estadounidenses en la ciudad saudita de Jeddah en la cual los delegados del CST insistieron en la puesta en vigor de los acuerdos del llamado Acuerdo de Jeddah, firmado en mayo último, centrado en la asistencia humanitaria a la población.
Otro tema de desacuerdo es la composición de los participantes ya que mientras Washington concibe una asistencia solo de militares, el CST demanda la presencia de todos los integrantes del gobierno.
En contraposición, un portavoz de las RSF adelantó su presencia en la reunión que, a todas luces, nunca ocurrirá.
Desde el estallido de la guerra civil sudanesa hace 15 meses, más de 11 mil personas, en su mayoría civiles, murieron, una cantidad muy superior sufrieron heridas y casi 11 millones de personas se convirtieron en refugiados internos e internacionales.
Aliados durante la guerra con los separatistas de Sudán del Sur, ambos hombres entraron en diferencias irreconciliables sobre el destino de las fuerzas y las armas de las RSF que el presidente del CST quiere incorporadas al Ejército Nacional bajo su mando, posibilidad refutada por el caudillo de la milicia.
ro/msl
