De acuerdo con un comunicado de la Vicepresidencia, para llegar a este punto se recorrió un largo camino, en el que la vicemandataria desempeñó un rol vital pues fue ella quien lanzó la propuesta hace un año con el apoyo de la representación diplomática de Colombia en la sede la ONU, y para lo cual también se forjó una alianza estratégica con Brasil.
La adopción de la resolución por el organismo multilateral reconoce la lucha por la inclusión, la justicia y la igualdad para las mujeres afrodescendientes en Latinoamérica, el Caribe y en todo el mundo, que en Colombia tiene en la primera fila de esa batalla a Márquez.
Con la firma del documento, cada 25 de julio muchos países seguirán organizando eventos y agendas para celebrar a las niñas y las mujeres afrodescendientes y se tomarán medidas encaminadas a defender sus derechos, a atacar la discriminación y a mejorar su calidad de vida, apuntó el comunicado.
Resaltó además que este es un momento particularmente significativo, pues en diciembre próximo termina el Primer Decenio Internacional para los Afrodescendientes, proclamado por ONU en 2013, y Colombia trabaja para lograr la declaración de un segundo decenio, teniendo en cuenta que la deuda histórica con los estos pueblos está lejos de saldarse.
Este tema, abundó la comunicación, será un asunto a abordar en las reuniones bilaterales que sostendrá en Nueva York la vicepresidenta, y también ministra de Igualdad y Equidad, con las delegaciones de Brasil y Sudáfrica.
En sus encuentros platicará asimismo sobre la realización de la Cumbre de Biodiversidad (COP16), a celebrarse entre el 21 de octubre y el 1 de noviembre en Cali, ya que Márquez ha insistido en la necesidad de incluir la categoría de pueblos afro dentro del Convenio de Diversidad Biológica y en los mecanismos de protección de sus territorios.
Otro asunto a abordar tiene que ver con la importancia de seguir afianzando las relaciones con África, de acuerdo con el comunicado.
oda/ifs
