En sus contactos diplomáticos y reuniones, el jefe de gobierno destacó que la comunidad internacional debe cumplir con su deber hacia Líbano y apoyarlo en estas difíciles circunstancias.
Al mismo tiempo, enfatizó que la hostilidad israelí debe constituir un incentivo adicional y fundamental para la solidaridad entre los libaneses y no para abrir debates paralelos.
En este sentido, informó que mañana el Consejo de Ministros discutirá en detalle las medidas y procedimientos relacionados con el plan nacional de emergencia y el expediente de los desplazados sirios.
Según la cuenta en X del gabinete levantino, Mikati abordó la ayuda de las organizaciones internacionales con el coordinador de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Imran Riza.
También, la máxima figura del Ejecutivo libanés conoció de la asistencia brindada a los desplazados del sur a través del Programa Mundial de Alimentos, al recibir al director regional Matthew Hollingworth.
Al divulgar en días recientes su enfoque para restaurar la estabilidad, Líbano reclamó a la comunidad internacional desempeñar un papel decisivo e inmediato para calmar las tensiones y frenar la actual agresión israelí.
En este punto, insistió en la implementación plena y equitativa de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU para reducir o cesar inmediatamente las acciones provocativas, mitigar los riesgos y proteger a los civiles.
Al respecto, subrayó que la clave para la solución pasa por un alto al fuego de los ataques israelíes y el fin de la agresión contra el pueblo palestino y darles sus legítimos derechos.
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