Guiada por especialistas de Cubanacán Hoteles, Prensa Latina visitó en particular la Cueva de los Peces, un lugar para estancias en la correlación de monte y mar, donde los peces desempeñan el papel de escenario activo, independientemente de los bañistas.
Un espacio que siempre se repite por mucha gente, sean cubanos o extranjeros, porque se trata de un alto en el camino que obliga a un baño, sobre todo en estos tiempos de mucho calor.
La Cueva de los Peces está situada en Playa Girón, caverna sumergida, impresionante piscina natural de cristal claro con más de 70 metros de profundidad que se comunica con el mar por un túnel subterráneo.
En este bello lugar se puede hacer snorkeling y buceo, a partir de un rustico ranchón donde además está presente la gastronomía local.
Hablamos de un cenote, o laguna pequeña y profunda, que se comunica donde siempre se puede ver gente haciendo snorkel y dentro de la cueva, por supuesto, abundan los coloridos peces tropicales. Rodeada de toda belleza natural, algas marinas, corales, arena virgen y piedras, los peces danzan, como si no tuvieran humanos en derredor.
Zonas vírgenes y extensas franjas de playas, vegetación única y una fauna propia de cada lugar, surge como una de las opciones más atractivas para los miles de turistas que visitan cada año los diversos destinos de la isla, en particular el entorno de Playa Girón y la mencionada Cueva de los Peces.
Ese lugar pertenece a la Península de Zapata, en la occidental provincia de Matanzas, un humedal importante para Cuba y el Caribe, de acuerdo con evaluaciones científicas.
Con unos cinco mil kilómetros cuadrados de bosques, ciénagas, lagunas y canales de aguas claras, exhibe riqueza floral de más de 900 especies de plantas autóctonas y hasta 160 variedades de aves, 12 de mamíferos, anfibios y reptiles, en especial el cocodrilo, aunque enla cueva que nos ocupa solo hay peces.
Playas de azules aguas, bosques exóticos, ríos, lagos, cavernas inundadas, piscinas naturales, zonas vírgenes, espacio perfecto para unas vacaciones diferentes, con emociones, fotografías muy coloridas y en definitiva vivir la vida al natural.
La entrada a la Cueva está pegada a la carretera que une otros sitios de no menos interés, como es el caso de Punta Perdiz, y las playas Girón y Larga, para completar un panorama de una sola movida, en derredor de sitios que favorecen mucho a los viajeros y sus deseos de respirar aire puro.
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