En una declaración que circula aquí intitulada “Ni cohabitación, ni traición: el pueblo de Venezuela ya decidió”, las organizaciones manifestaron conocer, amar y defender al pueblo bolivariano por lo que refutaron la más mínima idea o sugerencia en ese sentido.
El rechazo está dirigido a las insinuaciones de “desarrollar intervenciones diplomáticas, políticas, militares o de cualquier tipo” en la nación sudamericana dirigidas a desconocer, de facto, el resultado de un proceso electoral ya concluido, y que dio por vencedor a Nicolás Maduro con el 51,95 por ciento de los votos.
“Estas insinuaciones no son otra cosa que el desconocimiento de su soberanía, y una falta de respeto a la voluntad de su pueblo expresada en las urnas el 28 de julio”, subrayó.
ALBA Movimientos expresó conocer el espíritu democrático de los gobiernos de Brasil y Colombia, y afirmó esperar que “sus dirigentes estén a la altura de los pueblos que representan y los eligieron: el respeto a la soberanía de la República Bolivariana de Venezuela y a sus instituciones”.
Asimismo alertaron que permitir versiones a medias tintas o la insinuación de métodos extranacionales para “resolver” el intento de golpe, “lo único que traerá será la creación de oportunidades para el imperialismo, que lleva más de 25 años soñando con el momento, pueda sepultar la Revolución”.
Ni (Gustavo) Petro entraría nunca en un “Frente Nacional” liderado por Álvaro Uribe; ni (Luiz Inácio) Lula da Silva sería parte de una coalición que encabezara (Jair) Bolsonaro, aseveró.
El texto señaló que la extrema derecha, antidemocrática por definición, no permitiría eso jamás, y no tiene sentido, ni siquiera pragmático, pedirle a Venezuela que lo haga.
La declaración enfatizó que ni los medios de comunicación, la OEA, Estados Unidos, ni ningún país de la región determinarán el destino de la Republica Bolivariana, sino el pueblo venezolano con la fuerza de sus legítimas instituciones.
Recordó que el respeto a la soberanía y la autodeterminación de los pueblos es “un principio que cualquier proyecto revolucionario debiera tener como prioridad” y debe hacer de esta una bandera política en las relaciones internacionales.
ALBA Movimientos convocó a las fuerzas progresistas y revolucionarias, consecuentes con la lucha antiimperialista, a “la defensa activa de Venezuela en este contexto de intento de golpe de Estado, desarrollado en la superficie por el único sector de la oposición local de corte fascista”, pero impulsado por Estados Unidos.
“Hoy van por Venezuela, mañana irán por nuestros otros pueblos”, advirtió, y llamó a no confundirse ni equivocarse porque el “enemigo sigue siendo el mismo, aunque se disfrace con nuevas ropas y nuevas máscaras”.
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