La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) calificó de muy fuerte el fenómeno -con una presión en su centro de 950 hectopascales- que afectará en breve a esta capital y otras regiones centrales de la costa del Pacífico en el archipiélago asiático.
Mientras All Nippon Airways y Japan Airlines cancelaron unos 500 vuelos, la Compañía de Ferrocarriles del Centro de Japón, JR Tokai, suspendió por completo el servicio de la línea de tren bala Tokaido Shinkansen entre Tokio y Nagoya durante este viernes.
Incluso, la Compañía de Ferrocarriles del Este de Japón, JR East, detuvo el servicio en partes de las líneas Tohoku, Joetsu y Yamagata Shinkansen desde alrededor de las 11 a.m., hora local, y valora otras suspensiones en dependencia de las condiciones climáticas.
Junto al riesgo de fuertes lluvias, la JMA advirtió sobre la probabilidad de desplazamientos de tierra, marejadas y ráfagas de vientos huracanados en gran parte de la región central de Kanto, que incluye a la capital y a Chiba, y otras zonas de la costa oriental del país.
Según la entidad, los vientos de hasta 162 kilómetros por hora de Ampil podrían causar el derrumbe de viviendas y otras infraestructuras en las islas Izu, al sur de Tokio, y alertó del riesgo de voladura de objetos de forma peligrosa para los peatones o incluso el volcado de vehículos en Kanto.
arc/msm
