“Prevenir y contener la propagación de la polio requerirá un esfuerzo masivo, coordinado y urgente”, dijo a la prensa el alto representante al anunciar que el organismo está preparado para desplegar una vital campaña.
La Organización Mundial de la Salud ha aprobado la liberación de 1,6 millones de dosis de la vacuna contra la polio mientras que el Fondo para la Infancia (Unicef) coordina la entrega de las vacunas y el equipo de cadena de frío para almacenarlas.
A la par, la Agencia de ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa), tiene equipos médicos listos para administrar las vacunas y ayudar con la logística.
Dada la devastación generalizada en Gaza, se necesitará una cobertura de vacunación de al menos el 95 por ciento durante cada una de las dos rondas previstas para prevenir la propagación de la polio y reducir su aparición, detalló Guterres.
La campaña, adelantó, incluirá 708 equipos en hospitales y centros de atención primaria de salud, muchos de los cuales apenas funcionan, y 316 equipos de extensión comunitaria en toda Gaza.
Sin embargo, el titular de Naciones Unidas advirtió otros desafíos claros para llevar adelante el proceso como la facilitación del transporte de vacunas y equipos de cadena de frío en cada paso así como la entrada de expertos en polio a la Franja y de más combustible.
Por encima de todo, una vacunación contra la polio exitosa necesita seguridad para que los trabajadores de la salud realicen su trabajo, para los niños y las familias llegar a los establecimientos de salud y la protección de las instalaciones sanitarias, agregó.
“Seamos claros: la vacuna definitiva contra la polio es la paz y un alto el fuego humanitario inmediato. Pero en cualquier caso, una pausa en la lucha contra la polio es imprescindible”, insistió Guterres.
A juicio del máximo responsable de la ONU, resulta imposible llevar a cabo un proceso de vacunación «mientras la guerra se desata por todas partes».
El llamado de alerta coincide con el reinicio de las negociaciones por el fin del conflicto, y luego de que el virus fuera detectado en aguas residuales en Khan Younis y Deir al-Balah, lo que pone en riesgo a cientos de miles de niños en Gaza.
“Para implementar ese plan, necesitamos una pausa y, por supuesto, eso requiere un acuerdo entre las partes”, insistió además Guterres.
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