Según anunció su campaña, Trump hablará a sus simpatizantes la tarde de este sábado en el Mohegan Sun Arena, con capacidad para unas ocho mil personas, justo dos días antes del inicio en Chicago de la Convención Nacional Demócrata.
De acuerdo con los registros, esta será la séptima visita del exmandatario a Pensilvania en lo que va de año y al menos es la quinta vez que escoge a Wilkes-Barre desde 2016 para uno de sus mítines.
Trump también celebró un evento proselitista en Harrisburg el pasado 31 de julio, y dijo que planea retornar a Butler en octubre, aunque su campaña no confirmó esto último.
El exgobernante fue herido en una oreja en un tiroteo en Butler el 13 de julio por un tirador de 20 años, Thomas Matthew Crooks, abatido en el lugar.
Mientras, por la parte demócrata, el gobernador de Minnesota y compañero de fórmula de Kamala Harris, Tim Walz, desplegará esta propia jornada esfuerzos en Omaha, en su natal Nebraska.
Walz, oriundo de West Point, pretende potenciar sus raíces allí para buscar sufragios en un estado que dividen los votos electorales, pues a pesar de ser de tendencia republicana, el área que circunda a Omaha es disputada por ambos bandos.
Durante las elecciones de 2020 el entonces candidato demócrata ganó en el distrito y en 2016 fue Trump el vencedor.
Luego de esa reunión electoral, uno de los últimos actos de campaña antes de la Convención, Walz participará con Harris mañana en un recorrido en autobús por la zona de Pittsburgh, en Pensilvania, donde harán escalas en la parte occidental de ese estado.
La semana pasada Harris presentó oficialmente a su candidato a la vicepresidencia en su binomio en un mitin en Filadelfia, lo que indica la importancia que ambos partidos le dan a Pensilvania.
Ubicado en el noreste del país, ese es un estado que podría determinar el ganador o ganadora de las elecciones este año. En 2020, el triunfo de Biden en Pensilvania, Wisconsin, Michigan y Arizona definieron la mayoría de votos electorales que necesitaba para llegar a la Casa Blanca.
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