Como parte de la estrategia, el presidente egipcio, Abdel Fattah El-Sisi, recibió ayer al ministro de Asuntos Exteriores francés, Stéphane Séjourné, con quien dialogó sobre el tema.
Según un comunicado oficial, el mandatario destacó la necesidad de aprovechar las negociaciones indirectas en curso entre Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) para evitar una escalada.
El-Sisi advirtió que el conflicto actual empujará a la región a un ciclo destructivo de inestabilidad.
Asimismo, reafirmó la responsabilidad de la comunidad internacional de ejercer presión para reducir la tensión y abordar las causas fundamentales de la guerra mediante el establecimiento de un Estado palestino.
Por su parte, Séjourné elogió el papel vital de Egipto como mediador, junto con Qatar y Estados Unidos, para alcanzar un acuerdo de alto el fuego en Gaza y facilitar el intercambio de prisioneros.
Mientras, el canciller egipcio, Badr Abdelatty, abordó el tema en una conversación telefónica con su homólogo iraní, Ali Bagheri Kani.
El Ministerio de Asuntos Exteriores afirmó que el diálogo “se produjo como parte de la intensa comunicación de Egipto con todos los actores regionales e internacionales para contener la actual escalada”.
Fue la tercera conversación telefónica entre los funcionarios en menos de dos semanas.
Irán prometió vengarse de Israel tras el asesinato en Teherán de la máxima figura de Hamas, Ismail Haniyeh, una postura que también siguió el grupo libanés Hizbullah tras la eliminación en Beirut, casi de forma simultánea, de su comandante militar Fouad Shukur.
La anunciada represalia llevó a Estados Unidos a desplegar fuerzas adicionales en Oriente Medio en defensa de su principal aliado en la zona, lo cual elevó la tensión.
Se espera que esta semana se reúnan los mediadores en El Cairo para intentar buscar un acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamas en una nueva ronda de conversaciones, tras los contactos de jueves y viernes últimos en Doha, que no lograron los resultados esperados.
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