Six travailleurs humanitaires ont été tués en #RDC entre janvier et juin 2024.
À l’occasion de la Journée mondiale de l’aide humanitaire, le Coordonnateur humanitaire, @UN_Lemarquis, appelle à agir contre l’impunité des auteurs d’attaques contre les humanitaires et les civils. pic.twitter.com/gGMztPv9At
— OCHA DRC (@UNOCHA_DRC) August 19, 2024
En un mensaje divulgado en su cuenta en la red social X, a propósito del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria este 19 de agosto, Lemarquis significó que seis trabajadores humanitarios fueron asesinados y 11 secuestrados entre enero y junio de este año.
Añadió que más de 200 incidentes estuvieron dirigidos directamente contra el personal humanitario sobre el terreno, mientras que en los primeros seis meses de 2024, más de 630 civiles fueron trágicamente asesinados en los territorios de Mambasa e Irumu, en Ituri, y en los territorios de Beni y Lubero, en Kivu Norte.
El coordinador humanitario en la RDC criticó la indiferencia de la comunidad internacional ante esta situación, que “a pesar de la gravedad de las matanzas y del sufrimiento”, no ha mostrado suficiente indignación ante esta “situación catastrófica”.
“Esta falta de indignación colectiva, esta tolerancia, cuestiona profundamente nuestra humanidad y nuestra capacidad para prevenir y actuar contra la violencia sistemática que diezma vidas inocentes. Por eso llamo a esta crisis no sólo una de las más desatendidas del mundo, sino también una de las más toleradas”, remarcó.
Lemarquis señaló que este año el lema escogido para conmemorar la fecha es Actuar por la Humanidad, y es un llamado a la acción para proteger las poblaciones civiles y los trabajadores humanitarios contra la violencia y la impunidad.
Insistió en que los congoleños solo desean la paz.
Los conflictos y la violencia en la RDC han provocado no solo la muerte de cientos de personas, sino el desplazamiento de millones en busca de seguridad, lo que agudiza la crisis humanitaria en ese país.
Datos de la coordinación humanitaria estiman que en el primer semestre de 2024, 400 mil nuevos desplazados se sumaron a la abultada cifra existente para completar alrededor de 7,3 millones de personas que abandonaron sus hogares.
Estas personas requieren alimentos y condiciones mínimas de vida, en lo cual contribuyen los trabajadores humanitarios, que no pueden ser blanco de acciones violentas bajo ninguna circunstancia, subrayó Lemarquis.
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