Un comunicado del organismo pidió apoyo financiero para ampliar su respuesta en esa área geográfica con 16,5 millones de dólares adicionales.
Unicef aseguró que las comunidades menos favorecidas de la región podrían padecer las peores consecuencias de la enfermedad.
La mpox ha sido identificada en cinco países de la zona: Burundi, Ruanda, Uganda, Kenya y Sudáfrica, mientras que su nueva variante fue confirmada en los cuatro primeros de ellos.
Burundi registra actualmente el mayor número de infecciones en África Oriental y Meridional y cerca del 60 por ciento de los casos detectados corresponden a niños y adolescentes menores de 20 años.
Los riesgos para los niños de Burundi son mayores debido a la aparición simultánea de brotes de sarampión, dijo el Fondo para la Infancia.
De acuerdo con la ONU, aunque la propagación de la mpox es diferente a la de la Covid-19, las enseñanzas de la más reciente pandemia deben preservarse.
“Hay lecciones que debemos interiorizar sobre cómo abordar los brotes mundiales, incluida la solidaridad, la acción temprana y la financiación de la asistencia médica”, dijo al respecto el portavoz del secretario general (António Guterres), Stéphane Dujarric.
La pasada semana, la OMS declaró a la mpox como una emergencia de salud pública de preocupación internacional, tras la rápida propagación de una nueva cepa.
De acuerdo con el organismo, la enfermedad se transmite de animales a humanos y se propaga por contacto cercano con individuos o animales infectados a través de gotas respiratorias, sangre, fluidos corporales o lesiones.
Sus síntomas incluyen fiebre, erupción, dolores de cabeza, de garganta, de espalda y musculares, así como ganglios linfáticos hinchados.
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