Durante una visita a esta capital, el alto representante aseguró que la nación asiática tomó en sus propias manos la construcción de su destino.
“Las Naciones Unidas seguirán apoyando las aspiraciones del pueblo timorense en el camino que tiene por delante”, aseveró.
La consulta representó un hito histórico y resulta un llamado a la unidad y a la celebración del pasado colectivo, agregó el máximo responsable de la ONU.
El referendo se celebró el 30 de agosto de 1999, organizado por la Misión de las Naciones Unidas en el país y con el apoyo del entonces secretario general, Kofi Annan.
El proceso se originó tras la petición de BJ Habibie, en aquel momento presidente de Indonesia, y los votantes pudieron optar entre una mayor autonomía dentro de Indonesia o la independencia de Timor Leste.
En declaraciones a la prensa, Guterres consideró que esa experiencia fue posible en un mundo donde las divisiones geopolíticas no eran como las actuales.
Entonces, el Consejo de Seguridad se reunió y votó por unanimidad para una intervención liderada por Australia que Indonesia aceptó, recordó el titular del organismo.
“Dudo que una situación similar hoy tuviera el mismo resultado; con las divisiones geopolíticas que existen, dudo que el Consejo de Seguridad vote por unanimidad y se creen las condiciones de aceptación para que una intervención de este tipo”, lamentó.
El veterano diplomático calificó al mundo como un lugar “donde la impunidad es casi total”, sin respeto a la Carta de las Naciones Unidas o el derecho internacional.
“Vemos que las guerras continúan y que la comunidad internacional se ha mostrado impotente para resolverlas”, advirtió en referencia a los conflictos en curso en Sudán, Gaza, la República Democrática del Congo y Myanmar.
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