“Nosotros hemos dicho a la población de manera muy clara: vamos a dar por primera vez, luego de muchísimo tiempo, un censo extremadamente técnico, porque eso es lo que necesita el país y lo hemos hecho”, afirmó.
Al responder la interrogante de un periodista, tras la inauguración del Centro de Monitoreo del Comité de Seguridad Alimentaria en la ciudad de La Paz, el dignatario insistió en los elogios al ejercicio censal, realizado en marzo de 2023.
Recordó que organismos internacionales especializados avalaron esta encuesta nacional y consideraron que es uno de los mejores de la región.
“Nosotros lamentamos que nuevamente se quiera politizar el tema (…). Hay que ser claros acá y si no hay ningún fundamento técnico, esto se convierte básicamente en un tema político donde creo que los bolivianos ya estamos cansados de ese tema”, enfatizó.
Consideró el mandatario que “este Censo 2024 más bien debería enorgullecernos” porque a partir del mismo Bolivia tiene información georreferenciada, como en ningún otro empadronamiento nacional.
Arce calificó la información disponible a partir de ahora como la mejor y anticipó que se pondrá a disposición de los alcaldes, quienes podrán avanzar en el tema de la cartografía a raíz de este censo georreferenciado desde el punto de vista poblacional.
Recordó que el INE socializó los avances de la etapa postcensal, cuando autoridades cruceñas y de otras regiones del país llegaron hasta el coliseo paceño del Colegio Militar, donde en los últimos meses se procesaron los datos de las boletas censales con scanners de alta tecnología y software especializado.
“Han venido, han dicho que todo estaba bien, lo han dicho ellos. Y ahora, ¿por qué dicen que está mal?”, deploró.
Ratificó que el Gobierno nacional trabaja seriamente de manera absolutamente responsable con la cosa pública, e instó a dejar de lado ese tema político en un contexto de preelectoralización del país desde hace mucho tiempo.
De su lado, el director del INE, Humberto Arandia, informó que “en Bolivia, al 23 de marzo de 2024, somos 11 millones 312 mil 620 bolivianas y bolivianos”.
Describió que la distribución de la población por departamento es la siguiente: Santa Cruz (tres millones 115 mil 386 habitantes), La Paz (tres millones 022 mil), Cochabamba (dos millones cinco mil), Potosí (856 mil), Chuquisaca (600 mil), Oruro (570 mil), Tarija (534 mil), Beni (477 mil) y Pando (130 mil).
Explicó que Santa Cruz es el departamento de mayor crecimiento poblacional en términos relativos y absolutos respecto al anterior censo, con un incremento de 457 mil en los últimos 12 años.
Sin embargo, mucho antes de que se conocieran los resultados, actores políticos pusieron en duda las eventuales cifras y apenas se divulgaron este jueves, acusaron de irregularidades y hasta de fraude al INE.
El encarcelado preventivamente gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, sostuvo en su cuenta en X (antes Twitter) que se cometió “el fraude del millón” y pidió una auditoría con participación de instituciones internacionales de Derechos Humanos.
Una posición similar asumieron otros portavoces cruceños de las fuerzas extremistas de derecha y con diversos matices en las dudas sobre las cifras anunciadas, coincidieron el alcalde municipal de La Paz, Iván Arias, y la de la vecina urbe de El Alto, Eva Copa.
La senadora de Comunidad Ciudadana por Cochabamba, Andrea Barrientos, en tanto, expresó que los resultados del censo “no son creíbles” y “no coinciden con el crecimiento” poblacional.
En Santa Cruz, todos los sectores de la derecha -desde los extremistas hasta los más moderados- anuncian marchas de protesta y amenazan con realizar el próximo martes una asamblea pública de la “cruceñidad”.
Una acción de ese tipo antecedió en 2022 a 36 días de paros y bloqueos causantes de varias muertes, centenares de heridos, destrucciones y pérdidas superiores a los mil millones de dólares.
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