De acuerdo con las autoridades locales, las víctimas son agricultores, tres mujeres y un hombre de 32 años, y fueron trasladados a uno de los hospitales provinciales, luego de sufrir el impacto de metrallas en varias partes del cuerpo.
En junio pasado, dos menores perdieron la vida y otras tres personas resultaron heridas por la explosión de una potente mina remanente de los grupos terroristas, en un campo de pistacho en la provincia central de Hama.
Decenas de personas mueren cada año por la explosión de minas que los radicales sembraron en casas, carreteras y terrenos agrícolas antes de retirarse de las zonas que ocupaban ante el avance del ejército sirio.
Según datos de la Media Luna Roja Siria, la cifra de muertos y mutilados por explosiones de minas entre los años 2018 y 2022 alcanzó los cinco mil 70.
A su vez, la Cancillería siria reveló que el Ejército logró desmantelar más de 180 mil minas y otros artefactos explosivos, sin embargo, denunció que la ocupación extranjera y la presencia de grupos radicales en algunas regiones bloquean el acceso y la labor de desminado.
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