Los trabajadores de la institución también están involucrados en la realización de programas científicos que contribuyen a proteger el medio ambiente y avanzar en la soberanía alimentaria para lo cual mantienen estrechos vínculos con la Universidad Máximo Gómez Báez, de Ciego de Ávila.
La directora del Ciba, Yamilé Jiménez, explicó que participan en proyectos internacionales encaminados a promover el estudio de soluciones de adaptación para minimizar vulnerabilidades ante el cambio climático en comunidades costeras, amenazadas por el ascenso del nivel del mar y fenómenos hidrometeorológicos extremos.
Para lograr ese objetivo, dijo la experta, capacitan a pobladores y directivos en diversas temáticas a tener presente durante la toma de decisiones y puedan incorporar la perspectiva de riesgo en las estrategias de desarrollo territorial para confeccionar planes efectivos ante los cambios del clima.
Por su parte el subdirector de investigaciones de la institución, Javier González, puntualizó que un grupo jóvenes dedican sus tesis de grado de nivel superior a temas relacionados con el desarrollo sostenible en la Agricultura.
Sobre ese aspecto explicó que el Ciba contribuye a la diversificación de cultivos como respuesta al programa de soberanía alimentaria y aporta al incremento productivo en el cultivo del girasol, mediante la tecnología de Microorganismos Autóctonos Benéficos.
Los especialistas del centro científico, también tributan a la conservación y protección del recurso suelo con el uso de prácticas agroecológicas, ayudan a aumentar la producción de alimentos de origen animal y la obtención de productos con recursos locales, para dar respuesta al desarrollo económico- social del país.
mem/nmt