En un comunicado, el funcionario criticó los reclamos de Netanyahu de mantener a sus tropas en el llamado Corredor Filadelfia, en contra de lo acordado previamente como parte de las negociaciones sobre un alto el fuego.
El eje es una franja de tierra palestina de 100 metros de ancho y 14,5 kilómetros de largo que corre paralela a la frontera entre Gaza y Egipto, cuyo Gobierno advirtió que no tolerará allí a los soldados israelíes porque representa una violación del acuerdo de paz bilateral, firmado en 1979.
Precisamente, Aboul Gheit afirmó que las acusaciones de Netanyahu contra este país norafricano “son bombas de humo que lanza para encubrir su deseo de prolongar la guerra en aras del beneficio político y personal”.
Durante una conferencia de prensa hace dos días, el primer ministro defendió la presencia castrense en el corredor con el argumento de impedir la entrada de armas y pertrechos para las milicias palestinas desde Egipto.
El jefe de la Liga Árabe alertó a Netanyahu que de continuar sus ataques verbales podría perder el papel mediador de El Cairo en las negociaciones.
Necesitamos que el mundo presione para obligar a ese país a aceptar el fin de la guerra y eliminar así el peligro de una escalada regional, subrayó.
En similar sentido se pronunció este miércoles el Parlamento Árabe, que calificó de mentiras y engaños las declaraciones de Netanyahu “destinadas a obstruir los esfuerzos de mediación liderados por Egipto”.
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