Desde el principio, el presidente Vladimir Putin reitera que estamos dispuestos para una solución política y diplomática, pues la operación militar especial es una medida extrema, señaló Peskov en declaraciones al diario Izvestia en paralelo al Foro Económico Oriental en la ciudad rusa de Vladivostok. El vocero agregó que el Kremlin optó por esa medida extrema «luego de que la colectividad occidental y Ucrania rechazaron todas las propuestas de diálogo».
«Lo más importante para nosotros es lograr los objetivos que nos planteamos, cómo conseguirlo es algo secundario. Preferiríamos hacerlo por la vía pacífica, pero vemos ahora en Washington, ni en las capitales europeas, ni en Ucrania que se deja llevar por ellos, la propensión a los medios políticos y diplomáticos», aseveró.
Agregó que «por lo tanto, la operación militar especial tiene que continuar hasta que se alcancen todos sus objetivos».
Rusia desarrolla desde el 24 de febrero de 2022 una operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos, según Putin, son proteger a la población de un genocidio por parte del gobierno de Kiev.
Igualmente se persigue atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la Organización del Tratado del Atlántico Norte hacia el este.
A mediados de junio pasado, Putin formuló varias condiciones clave para iniciar las negociaciones de paz, en particular que Ucrania retire las tropas de cuatro nuevos territorios rusos (Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporozhie).
Además, que desista de adherirse a la OTAN y mantenga el estatus neutral, no alineado y no nuclear, y que se levanten todas las sanciones contra Rusia.
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