Por Fausto Triana
Aunque era amplia favorita para imponerse a una Serbia diezmada por numerosas bajas, el cuadro balcánico plantó cara y aguantó hasta lograr un valioso empate sin goles en Belgrado.
De todos modos, España, que llega con los galones de campeón europeo en julio pasado en Alemania, y actual monarca de la Liga europea de Naciones, pretende no desaprovechar su buen momento y dar una estocada importante ante los suizos el domingo.
En el torneo, esta vez pasan a la fase final los dos primeros al cambiarse el formato y añadirse la fase de cuartos. El tercero jugará una eliminatoria de permanencia y el cuarto descenderá directamente a la categoría B.
En esencia, el entrenador Luis de la Fuente podrá contar con sus explosivos extremos Nico Williams y Lamine Yamal, los mediocampistas Rodri Hernández y Fabián Ruíz, y los laterales Dani Carvajal y Marc Cucurella, con Dani Olmo de atacante.
La Roja está encuadrada en un exigente grupo A4, el cual también integra Dinamarca. Sin dudas, una de las llaves más exigentes de esta fase.
No fue precisamente un problema la falta de gol en la Eurocopa, pero la igualada con Serbia hace reflotar el fantasma de la profundidad del equipo. En realidad, el país ibérico mostró su vocación ofensiva, aunque sí desaciertos en los remates a puerta.
En todo caso, la Nations League no es un certamen muy querido y ofrece la oportunidad a los entrenadores de consolidar el trabajo de sus colectivos.
En la justa, se antoja muy pareja la serie A2, con Francia, derrotado por Italia 1-3, y Bélgica, que doblegó sin problemas a Israel 3-1.
Alemania, en la llave A3 de favorita al lado de Países Bajos, se estrena este sábado contra Hungría. Lo hará con Joachim Kimmich de capitán, tras el retiro de la Mannschaft de Ilkay Gundogan, y de los míticos Toni Kroos y Manuel Neuer.
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