El gobernante recibió en el Palacio de las Garzas(sede gubernamental) a gremios médicos, jefes de bancadas legislativas y representantes del sector privado, en medio de denuncias de organizaciones sociales sobre posibles medidas paramétricas como el aumento de la edad de jubilación y las cuotas obrero patronales.
Los colectivos también han rechazado en las calles la aprobación en la Asamblea Nacional (parlamento) del nuevo director de la CSS, el empresario de seguros Dino Mon, quien asumirá el venidero 1 de octubre, pero cuestionado por defender políticas privatizadoras en la única entidad pública que atiende a los jubilados.
Para los movimientos populares, el establishment y el poder económico lanzó la línea; y los diputados impusieron al verdugo de los asegurados en una votación turbia, no transparente, según publicaron en las redes sociales,
Por su parte, los galenos plantearon al jefe de Estado que se debe afinar el tema de unificación de la CSS y el Ministerio de Salud , pues es más fácil hablar de una coordinación efectiva para enfrentar los problemas en los servicios y la falta de medicamentos.
La CSS maneja la plantilla más grande de todo el aparato estatal, con 31 mil 356 funcionarios, y un presupuesto cercano a los siete mil millones de dólares.
El mayor de sus actuales desafíos son las reservas del subsistema exclusivamente de beneficio definido y el fideicomiso que se agotan este año.
En los últimos siete días, también el presidente panameño anunció que añadiría a la provincia de Bocas de Toro- más conocida por sus atractivos turísticos- al programa de toque de queda que ya tienen la caribeña Colón y el distrito capitalino de San Miguelito, debido al auge del delito en ese occidental territorio.
La medida en la provincia fronteriza con Costa Rica, dijo Mulino, prevé evitar que menores de edad incurran en delitos como el narcotráfico y el enfrentamiento a pandillas asociadas a bandas criminales como el Cartel del Golfo(México) y el Tren de Aragua( Venezuela).
Ante los medios de comunicación el mandatario reveló que es esta una primera oportunidad a esta medida de enfrentamiento a la delincuencia, pero si aprecia que no hay colaboración o no funciona como debe ser, vendrán acciones más fuertes, sin ofrecer más detalles.
Calor Calor y Bagdad, las dos principales federaciones de pandillas rivales en el istmo, se han vuelto más sofisticadas en los últimos años, avanzando en la cadena de suministro para negociar cargamentos de droga fuera del territorio panameño.
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