Tras recibir el Doctorado Honoris Causa de la Universidad Nacional del Oeste, la exmandataria ofreció una clase magistral en la que analizó la situación actual y cuestionó las políticas del líder de La Libertad Avanza.
Gobernar no es solo manejar la macroeconomía. Lograr el crecimiento con inclusión social es la verdadera virtud, no que se mueran todos de hambre para que sobre la plata. Sin pagar deudas, ahogando a las provincias, no construyendo obras públicas, sin comprar vacunas ni hacer escuelas y hospitales, así cualquiera puede, señaló.
Llegó al gobierno en nombre de la libertad y criticando al Estado. A nueve meses de gestión todos los precios fundamentales de la economía (el tipo de cambio, las tasas de referencia del Banco Central, los salarios y el costo de los bienes y servicios) están intervenidos y regulados por el Ejecutivo en favor de determinados sectores, apuntó.
Indicó que el ajuste fiscal llevado a cabo afecta a los territorios, las universidades, los jubilados y los trabajadores que perdieron su poder adquisitivo.
Hoy somos el país más caro en dólares de la región. Todos están creciendo y nosotros vamos para atrás. ¡Basta, Milei, de engañar y envenenar a nuestros chicos diciéndoles que hace 100 años éramos una potencia! Éramos un desastre. (…) Si la educación hubiera llegado a todos los rincones, estas cosas no estarían pasando, no podría venir un lunático a decirnos cosas que no sucedieron y que son mentira, afirmó.
Fernández además criticó las ofensas proferidas constantemente por el mandatario.
Hay un niño desaparecido desde hace 90 días y se presume que se lo llevaron para tráfico sexual. Tenemos un diputado provincial acusado de abuso infantil y otro legislador detenido por lo mismo. Las palabras de un presidente no pueden contener violencia simbólica o explícita; tienen que ser sanadoras, dijo.
Por otra parte, celebró la aprobación por el Senado de una ley de financiamiento universitario y consideró que el veto de Milei a una norma de movilidad jubilatoria fue un triunfo pírrico.
Lo logró por cinco radicales a los que les compraron el voto. Ellos lo pegaron a la casta de la que tanto hablaba, comentó.
Como siempre, a todo proceso de ajuste le siguen los palos. Vimos a ancianos apaleados, a una niña atacada con gas y a un gobierno mintiendo descaradamente. Siempre operaron así, pero ahora es más explícito porque la situación es más aguda y se caen las máscaras y los disfraces, añadió.
Al dirigirse a las personas reunidas, Fernández instó a fortalecer la solidaridad y el amor.
Los antiperonistas sueñan con que desaparezcamos. Nosotros jamás hablamos de exterminar al otro; de competir e ir a elecciones, sí. Aprendamos a respetarnos porque de eso depende que tengamos un país mejor. Los problemas no se solucionan pisándole la cabeza a los pobres para darle más a los ricos, comentó.
Confío infinitamente en la fuerza del pueblo. La historia se toma sus tiempos. La patria no se vende, concluyó.
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