La reportera del diario nacional Al Akhbar informó de la intimidación directa a través de WhatsApp desde un número israelí con el texto: «Te separaremos la cabeza del cuerpo si no te vas de Líbano».
Según narró, en el mensaje la amenazaron con acabar su vida, destruir su casa y la instaron a abandonar el país.
Khalil informó a las autoridades pertinentes, quienes confirmaron la estrategia recurrente de Israel de amenazar a las personas.
En declaraciones al canal panárabe Al Mayadeen, desde el sur de Líbano Khalil explicó que esta advertencia es contra todos los periodistas que revelan las violaciones israelíes.
La reportera recibió la amenaza el 25 de agosto en su teléfono personal, y las autoridades de seguridad confirmaron que el número provenía de Israel.
El presidente del Sindicato de Periodistas Libaneses, Joseph Al-Qusseifi, consideró tal mensaje contrario a todos los tratados internacionales que protegen a los periodistas en tiempos de guerra.
Subrayó que la amenaza es parte de una campaña más amplia contra periodistas en Gaza y el sur de Líbano.
Por su parte, la Federación Internacional de Periodistas y otras entidades globales condenaron estos actos y llamaron la atención sobre el peligro de los comunicadores al denunciar los crímenes israelíes.
Los ataques de las fuerzas de Tel Aviv contra periodistas en el sur de Líbano causaron la muerte de la corresponsal de Al Mayadeen, Farah Omar, y el camarógrafo Rabee Al-Maamari, además del fotógrafo de Reuters, Issam Abdallah.
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