Según cifras oficiales, la poderosas tormenta dejó además mil 921 heridos, dañó alrededor de 232 mil casas y produjo serias afectaciones en 190 mil hectáreas de arrozales, casi 48 mil hectáreas de cultivos y unas 32 mil hectáreas de árboles frutales.
Además, tres mil 269 jaulas de piscicultura fueron destruidas o arrastradas y más de 2,6 millones de aves de corral y ganado murieron.
Por otra parte, innumerables establecimientos comerciales, oficinas y escuelas quedaron sin techo y sufrieron daños, numerosos postes de electricidad y telecomunicaciones y torres de red móvil fueron derribados y decenas de miles de árboles urbanos fueron arrancados o rotos.
También se produjeron cortes generalizados de electricidad e interrupciones de las comunicaciones en Quang Ninh, Hai Phong, Thai Binh, Hai Duong y Hanoi.
De acuerdo con la información ofrecida hoy en una reunión gubernamental para discutir soluciones urgentes encaminadas a superar las consecuencias de Yagi, el ejército, la policía y las fuerzas de respuesta a desastres de base guiaron durante la tormenta a 51 mil 319 barcos, vehículos pesqueros y buques de transporte a refugios seguros.
Organizaron además la evacuación de 52 mil 979 personas en granjas de peces, torres de vigilancia de acuicultura y casas frágiles y reubicaron a 74 mil 526 hogares con 130 mil 246 personas en zonas propensas a inundaciones a lugares seguros.
El ejército movilizó 438 mil 275 efectivos y seis mil 642 vehículos para responder al tifón y otros 107 mil 911 efectivos y dos mil 142 vehículos para hacer frente a inundaciones y deslizamientos de tierra. Asimismo, más de 150 mil policías y soldados participan en labores de respuesta y recuperación tras el tifón Yagi.
Las autoridades locales, los equipos de respuesta a desastres, las organizaciones juveniles y otras fuerzas también han sido movilizadas para responder a las consecuencias del desastre.
Por su parte, los Comités del Partido y las autoridades locales dirigieron eficazmente los esfuerzos de comunicación, proporcionando información oportuna sobre la evolución de la tormenta y las inundaciones, así como las instrucciones del Gobierno y agencias correspondientes para garantizar una respuesta proactiva a los desastres naturales.
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