En declaraciones a Prensa Latina, Gao Huiwu, secretario del Consejo y director del departamento de publicidad de esa compañía, recordó que esta fue la primera base del país en alcanzar los niveles de 100 millones y 200 millones de toneladas.
«La empresa cuenta con 13 minas modernas, entre ellas la mina subterránea de carbón más grande del mundo, Daliuta, con una producción anual de 33 millones de toneladas», dijo.
De acuerdo con el experto, la mina Bulianta, con una producción de 28 millones de toneladas, se posiciona como la de mayor producción por pozo a nivel global.
Shendong Coal Group comenzó el desarrollo del distrito minero de Shenfu Dongsheng en 1984 y en la actualidad toda la maquinaria que utiliza es de factura nacional, lo que le permite altos niveles de autosuficiencia.
Gao subrayó la trayectoria de la empresa en la construcción de una base moderna de producción de carbón de 200 millones de toneladas, única en el mundo.
El vocero también resaltó que la compañía suministró hasta el momento más de tres mil 800 millones de toneladas de carbón al país, «por lo que es un alto contribuyente de la seguridad energética de China y al desarrollo de su economía nacional», aseveró.
Shendong Coal estableció más de 100 nuevos récords entre las empresas del gigante asiático, obtuvo mil 731 patentes autorizadas y ganó ocho premios nacionales de progreso en ciencia y tecnología.
Sus productos principales, como carbón en trozos, carbón de ceniza ultrabaja y carbón mezclado, se utilizan en las industrias de energía, química y metalurgia.
Según el experto, la empresa cuenta con una tasa de mecanización del 100 por ciento en la minería y una eficiencia máxima de producción de carbón bruto de 150 toneladas por trabajador, indicadores que están a la vanguardia a nivel nacional.
Por otro lado, la compañía está a cargo de la producción y operación de las principales minas del campo carbonífero de Shenfu-Dongsheng, la mina de Baode y programas auxiliares en las áreas ricas en carbón de la Región Autónoma de Mongolia Interior y las provincias de Shaanxi y de Shanxi.
Para China la seguridad energética es una cuestión estratégica relacionada con el desarrollo económico y social del país, al tiempo que es calificada como crucial para la prosperidad y la estabilidad a largo plazo.
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