Con drones, misiles y cohetes, el movimiento libanés confirmó 10 acciones en el frente de apoyo a la Franja de Gaza y como respuesta a la agresiones israelíes contra las aldeas sureñas en Blida, Houla y Kfar Shuba.
En declaraciones separadas, la Resistencia libanesa anunció el bombardeo con andanadas de cohetes Katysuha contra los cuarteles de Ramim y Ramot Naftali.
De igual manera, notificó impactos directos con ametralladoras y misiles contra los sitios de Ruwaisat Al-Alam y Al-Samaqa, en las colinas libanesas ocupadas de Kfar Shuba.
En paralelo, golpearon con cohetes el despliegue de soldados enemigos en las cercanías del cuartel de Metat, los búnkeres de artillería en Al-Zaoura y el sitio de Birket Risha.
También, se atribuyó el disparo de misiles al emplazamiento de Metula y, en sus alrededores, ejecutó un ataque aéreo con un dron de asalto a una reunión de uniformados y lanzó cohetes a posiciones militares.
De acuerdo con el comentarista militar Yossi Yehoshua del diario hebreo Yedioth Ahronoth, cada día se disparan desde Líbano cientos de cohetes y como resultado decenas de miles de hombres y mujeres israelíes están desplazados de sus hogares desde hace un año.
El general de la reserva del ejército israelí, Yitzhak Break, reconoció la incapacidad de las Fuerzas de Defensa para derrotar a Hizbulah y avizoró que un posible ataque terrestre en el norte contra Líbano expone al Estado a un grave peligro.
Mediante un artículo publicado en el periódico Haaretz, el oficial criticó los planes de trasladar al norte el centro de operaciones del ejército, así como el anuncio del ministro de Defensa Yoav Gallant sobre un inminente ataque terrestre, lo cual describió como una fuente de «preocupación».
Según comentó Break, ese plan contra Hizbulah podría desencadenar una guerra en múltiples frentes, con miles de misiles, cohetes y drones que dispararán hacia el frente interno de Israel.
El columnista Sever Plotsker apuntó para Yedioth Ahronoth que es aconsejable dejar atrás los peligrosos y delirantes sueños de restaurar el imperio israelí desde el Litani (sur de Líbano) hasta Filadelfia (cruce fronterizo entre Gaza y Egipto), y centrarse en asegurar la liberación de los prisioneros en Gaza sin más retrasos.
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