Harris respondió preguntas ante las cámaras de tres miembros de la Asociación Nacional de Periodistas Negros, seis semanas después de que su rival republicano, el expresidente Donald Trump cuestionara su herencia racial y atacara a una reportera durante la convención nacional de la organización, celebrada en Chicago.
Como era de esperar, uno de los puntos abordados fue el segundo intento de asesinato a Trump, ocurrido el domingo pasado mientras el magnate jugaba en su campo de golf en Florida. En ese sentido, la demócrata recalcó que tiene plena confianza en el Servicio Secreto.
“Sí, la tengo”, respondió la candidata demócrata cuando se le preguntó si se siente segura con la protección del Servicio Secreto y cambió de tema para hablar sobre los falsos rumores acerca de los inmigrantes en la ciudad de Springfield, Ohio, promovidos por el binomio republicano.
Particularmente Trump impulsó aún más la falsa narrativa en el primer debate contra Harris, cuando expresó, en horario estelar en el escenario del cara a cara, que “en Springfield se están comiendo a los perros. La gente que entró, se está comiendo a los gatos”.
La vicepresidenta denunció esa postura de su oponente en el panel con los periodistas. «Aprendí hace mucho tiempo en mi carrera, teniendo experiencia como fiscal, que cuando tienes estos puestos, cuando tienes ese tipo de micrófono frente a ti, realmente debes comprender a un nivel muy profundo cuánto significado tienen tus palabras», subrayó.
Lamentó que en Springfield han recibido amenazas después de esas afirmaciones infundadas y si bien ella cuenta con el resguardo de la agencia federal “eso no cambia mi perspectiva sobre la importancia de luchar por la seguridad de todos en nuestro país”.
Comentó además que habló con Trump, a quien le dijo este martes que “no hay lugar para la violencia política en los Estados Unidos”.
También se refirió en una de sus respuestas a la guerra de Israel y el movimiento palestino Hamás en Gaza. Especificó que no difiere de la política del presidente Joe Biden, pero acotó que es hora de un alto el fuego duradero y un acuerdo sobre los retenidos.
“Creo absolutamente que esta guerra tiene que terminar, y tiene que terminar lo antes posible, y la forma de lograrlo es logrando un acuerdo sobre los rehenes y el alto el fuego», insistió.
A menos de 50 días de las elecciones en Estados Unidos, los dos candidatos que se disputarán la presidencia este año mantienen una carrera muy reñida.
Según encuestas no ocurrió prácticamente cambio alguno en el apoyo de los votantes hacia los contendientes después del debate del 10 de septiembre. Harris sigue con ventaja, pero dentro de los márgenes de error.
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