La propuesta tenía plazo de aprobación hasta la medianoche de esta jornada, por lo que ahora el presidente Gustavo Petro posee la potestad para dar luz verde al documento mediante un decreto.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, declaró que insistirán en llevar adelante el Presupuesto por 523 billones de pesos (más de 130 mil millones de dólares al cambio actual), así como la Ley de Financiamiento complementaria, cuyo objetivo es recaudar 12 billones de pesos para paliar el déficit presupuestal (unos tres mil millones de dólares).
Según estimó el director del Departamento Nacional de Planeación, Alexander López, el proyecto se hundió porque el Congreso le “huyó al debate, a las propuestas y al diálogo, como nuestro Gobierno siempre lo ha planteado”.
Sobre el tema se pronunció desde Nueva York el propio mandatario del país, que participa en el debate general de Naciones Unidas.
“Creo que más grave que las comisiones económicas del Senado no aprueben el presupuesto, es que la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público no apruebe los pagos de la deuda externa del país mediante la táctica de la inasistencia. Eso lleva a un default artificial, a encarecer la deuda y a una pérdida fiscal incuantificable”, escribió en X.
El comentario responde a que la nación sudamericana podría entrar en cesación de pagos de sus compromisos financieros internacionales si la entidad legislativa encargada sigue demorando su aprobación para avalar préstamos y emisiones de bono de deuda externa, debido a la falta de quórum requerido para reunirse y dirimir la cuestión.
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