Un comunicado divulgado este miércoles por la Oficina de Prensa de la Santa Sede señala que, en un telegrama firmado por el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, el Sumo Pontífice expresó sus condolencias por las víctimas provocadas por esa catástrofe ocurrida el sábado último, en la que murieron más de 50 personas.
El Papa envió sus oraciones por los fallecidos y por sus familiares en duelo, a la vez que patentizó su solidaridad espiritual con los heridos e invocó, para quienes se vieron afectados por esta tragedia, fortaleza, consuelo y paz.
La explosión, según fuentes iraníes, se produjo mientras unas setenta personas trabajaban en el lugar, y todo indica que fue provocada por una fuga de metano.
Se trata de uno de los peores desastres mineros en la historia reciente de la nación persa y su presidente, Masoud Pezeshkian, ordenó la apertura de una investigación, para esclarecer las causas de este hecho y determinar sus responsables.
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