Fue en el estadio Campeón del Siglo, con resultado sin goles, y con un operativo de seguridad que hasta el final de la contienda estuvo resguardado por unos 800 policías uruguayos.
Los carboneros enfrentaron a los brasileños con la ventaja de haberles derrotado hace una semana 1-0 en el Maracaná.
La paradoja fue el buen desempeño de Girodan de Arrascaeta, uruguayo y mejor jugador de la última edición del fútbol profesional brasileño, quien no pudo cambiar el resultado del partido desde su posición en el equipo carioca.
Con el empate, Peñarol irá a semifinales por la Copa Libertadores ante Botafogo, otro aspirante brasileño que antes venció en penales a su coterráneo Sao Pablo.
Antes, Atlético Mineiro derrotó a Fluminense y será el rival de River en las semifinales de la Copa Libertadores.
Hoy vuelve Peñarol, como en sus viejos tiempos, a la cúspide del futbol sudamericano, exclamó un narrador del fútbol local.
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