Rusia expresó desde el principio su desacuerdo categórico con la idea sin sentido de los países occidentales sobre la resolución de la Conferencia General del OIEA respecto a la RPDC, dijo Lavrov, según publicó este jueves la página oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores del país eslavo.
El ministro, al ser interrogado por la prensa sobre el tema, también puso de relieve que Moscú «constató claramente la falta de consenso en la Conferencia General» sobre la resolución.
A su vez, Rusia comprende la posición de Pyongyang de que el escudo de misiles nucleares y otras medidas de autodefensa le sirven como la base para garantizar la independencia y seguridad nacional, agregó.
Como ya ha sucedido en la historia, prosiguió Lavrov, Rusia y la RPDC vuelven a enfrentarse a un enemigo común que busca dañar las relaciones de los dos países.
Iremos fortaleciendo constantemente la amistad y la cooperación con el hermano pueblo coreano y no permitiremos que estos planes hostiles se hagan realidad, prometió el canciller ruso.
Además, el alto diplomático destacó la confianza entre los líderes de Rusia y la RPDC y subrayó que esta «se basa en las evaluaciones similares de la actual situación internacional».
Según el canciller, Moscú está firmemente comprometido a implementar todos los acuerdos de los líderes de las dos naciones, incluido el tratado de asociación estratégica integral firmado por Vladimir Putin y Kim Jong Un en junio pasado.
En 1992, la RPDC y el OIEA firmaron un acuerdo de salvaguardias, seis años después de que Pyongyang suscribiera el Tratado de No Proliferación Nuclear.
Sin embargo, en 1993 se negó a abrir sus centros nucleares a la inspección, y un año después, se retiró del OIEA.
Desde entonces, el organismo ha aprobado anualmente una resolución que insta a Pyongyang a que elimine cualquier programa de armas nucleares, la última de las cuales fue adoptada la semana pasada.
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