La mayoría de los ecuatorianos lamenta que en el horario nocturno es cuando más se producen este tipo de hechos delictivos.
A propósito, la noche de este domingo siete personas perdieron la vida durante un ataque armado en la ciudad de Samborondón, en la provincia costera de Guayas, mientras apostaban en una pelea de gallos.
Según información policial, varios hombres armados llegaron en motocicletas y comenzaron a disparar, mientras algunos clientes bebían y apostaban en las peleas.
Se espera que en las próximas horas las autoridades se pronuncien sobre este hecho que provocó pánico en ese sector rural de Guayas.
Datos del Ministerio del Interior, citados por medios locales de prensa, detallaron que el mes de agosto ha sido el más violento en lo que va de año en esta nación sudamericana, con 603 muertes violentas.
La criminalidad aumentó este año en ocho provincias de Ecuador, aunque a nivel nacional el número de muertes violentas se redujo alrededor de un 19 por ciento, según cifras oficiales.
El Ministerio del Interior publicó que entre enero y julio en todo el país hubo tres mil 631 homicidios, lo que representa una disminución de ese delito en comparación con 2023, año más violento en la historia de Ecuador, que dejó en ese mismo periodo cuatro mil 464 asesinatos.
Sin embargo, en ocho territorios la inseguridad creció en los últimos meses en comparación con el año anterior, según un reporte del portal digital Primicias.
Esas provincias son Orellana, Tungurahua, Azuay, Cañar, Napo, Bolívar y Sucumbíos, aunque numéricamente donde más muertes violentas se reportaron fue en Guayas, Los Ríos y Manabí.
En Ecuador rige desde enero último la declaratoria de conflicto armado interno, disposición con la cual el presidente Daniel Noboa busca frenar la inseguridad y el crimen organizado.
No obstante, los hechos violentos continúan en las calles del país andino pese a la presencia de militares y los continuos estados de excepción.
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