En el reporte, divulgado en el sitio oficial de esa empresa, con sede en la ciudad de Bolonia, en la norteña región de Emilia-Romaña, se destaca que en la incidencia de ese ciberdelito preceden a esta nación, a nivel global Estados Unidos, Rusia, Alemania y Francia, mientras en la sexta posición aparece Reino Unido.
Los últimos datos brindados por el Observatorio Cibernético del CRIF muestran además que Europa ocupa el primer lugar entre los continentes más golpeados por el intercambio de datos ilícitos de tarjetas de crédito, con un crecimiento significativo respecto al semestre anterior del 107 por ciento.
En el primer semestre del presente año el 90,7 por ciento de los usuarios italianos recibieron al menos una advertencia de la denominada web oscura de Internet, la cual se suele asociar con actividades ilegales, como el narcotráfico y las violaciones de la seguridad de los datos.
Entre las características comunes encontradas entre los particulares alertados, los grupos de edad más implicados son los de 51 a 60 años, que representan un porcentaje de 25,8 puntos del total, seguidos de los de 41 a 50 años, con 25,5 puntos porcentuales, mientras en general un 64 por ciento son hombres, precisa el análisis.
Beatrice Rubini, directora ejecutiva del CRIF, señaló al respecto que “los datos recopilados en el primer semestre de 2024 confirman una tendencia alarmante: ataques cada vez más sofisticados y personalizados a los perfiles de las víctimas permiten robar e intercambiar datos personales a través de la web oscura”.
Estas ciberagresiones tienen como objetivo, según apuntó Rubini, “obtener una ventaja económica en detrimento de las propias víctimas, lo que pone de relieve la importancia de mantener una alta atención cada vez que se nos invita a proporcionar datos personales y de adoptar herramientas de protección”.
Las credenciales robadas en la web pueden utilizarse con diversos fines, como entrar en las cuentas de las víctimas, utilizar servicios de forma abusiva, enviar mensajes con solicitudes de dinero o enlaces de phishing, enviar malware o ransomware, con el fin de extorsionar o robando dinero, añade el documento.
El factor humano es fundamental en este tipo de robo de ciberdelitos, es decir, la falta de atención del usuario es una de las causas más detectadas, al igual que las contraseñas mal elaboradas o utilizadas para múltiples cuentas, agrega la fuente.
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