El encuentro coincide con la advertencia de Naciones Unidas por la situación de los civiles atrapados en un conflicto que ya amenaza con desbordarse más allá de Medio Oriente.
La víspera, el organismo confirmó que espera un aumento del número de desplazados mientras las Fuerzas de Defensa de Israel siguen emitiendo órdenes de evacuación, incluso en 30 aldeas del sur del Líbano entre el lunes y el martes.
Más de 100 mil personas se trasladaron del Líbano a Siria, mientras que más de 200 mil personas abandonaron el sur libanés y otras 60 mil huyeron de sus hogares en el norte de Israel.
La Agencia de la ONU para los Refugiados sigue intensificando su respuesta de emergencia y trabajando con sus socios para brindar apoyo humanitario y de protección urgentes en su respuesta a los desplazados, confirmó el foro.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, condenó la ampliación del conflicto en Oriente Medio, al advertir de la sucesión de escaladas en la región.
“Esto tiene que parar. Necesitamos un alto el fuego sin dudarlo”, reclamó en un comunicado divulgado por su portavoz.
Antes, el titular del organismo pidió un alto el fuego inmediato así como respeto a la soberanía y la integridad territorial del Líbano.
Guterres dialogó este martes con el primer ministro libanés, Najib Mikati, a quien confirmó que el sistema de las Naciones Unidas en el país está movilizado para ayudar a todos los necesitados como consecuencia de la ofensiva.
El máximo responsable de Naciones Unidad anunció además un llamamiento a la comunidad internacional para reunir 426 millones de dólares destinados a apoyar la situación humanitaria.
El monto tiene por objeto apoyar a un millón de personas con asistencia humanitaria durante los próximos tres meses.
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